HASTA QUE YO ME CANSARA...

HASTA QUE YO ME CANSARA…

 

Se me agotó la luz,

se me agotaron las ganas,

los impulsos,

me cansó la letanía de mi nombre vacío

y la luz de la luna, que solo dejaba

vacío en mi alcoba…

 

Me cansó la risa de los demás,

que me hacía a mi cada vez más sombría,

me enamoré de la penumbra de la noche,

del estar a solas, rumiando un dolor,

del aullido del lobo, que me sonaba a muerte,

me enamoré de la tristeza

 que me abrazaba enloquecida…

 

Y entonces comprendí el sentido de mi vida…

arrastrar las llagas mientras mi Dios quisiera…

o hasta que yo me cansara…  

 

SÉ QUE LA VIDA ME ESPERA...

JUSTO EN ESE INSTANTE...

el sueño Aun
ha

Aún no son las seis de la mañana,
el sueño hace ya rato que se marchó a otro lugar...

Las pesadillas de la noche se alejan y acuden los fantasmas del día...

Y entonces, en esta soledad que muerde, me pregunto...
¿Vale la pena vivir, vale la pena entregarse al embrujo de un sueño, vale la pena soñar?...

Y es ahí, en ese instante, donde el dolor escuece en la piel,
es ahí, en ese instante, cuando siento el frío de su indiferencia,
una indiferencia que se clava en mi costado y se cuela por mis poros, hasta hacerme supurar el alma...

Es ahí, en ese instante, donde el roce de su olvido
se hace tangible y me hace sentir tan pequeña,
tan vejada, tan marchita...

Me castigo como a una niña pequeña, de cara a la pared
y es ahí, justo en ese instante,
donde reniego de la vida y le doy la espalda...

LLUEVE...

Llueve...

Una lágrima se hace charco

allí, donde yo te he querido,

donde mueren las malvas

y crece el olvido...

LA DE PASO...